Fui Dirigente de los estudiantes Universitarios del Ecuador y recibí una invitación para asistir a Metrópolis – Brasil, a un encuentro organizado por la Federación de estudiantes Católicos de América Latina. Llegado el día de mi retorno, opté por el pasaje denominado “El círculo mágico” que permitía volver a Ecuador pasando por capitales de países de la región. Quería visitar Buenos Aires para entre otras cosas, comprar libros y visitar al ex Presidente del Ecuador radicado en esa ciudad, el Dr. José María Velasco Ibarra.
Para mi, un joven dirigente universitario, el referente político de la época sin duda era el Dr. Velasco Ibarra, cinco veces Presidente del Ecuador quien dominó la escena política en el país por más de cuarenta años. Gracias a gestiones de la Embajada de Ecuador en Argentina, pude contactar con su domicilio y tuvo la gentileza de recibirme, siendo aún el día 12 de octubre de 1976, día de la raza.
Llegó la entrevista que siempre soñé con el hombre público más grande que ha tenido el Ecuador en los últimos tiempos, conversamos de varios temas, saludé a su esposa, Doña Corina del Parral. Siento que llegué a conmoverlo cuando me permití recitarle fragmentos de sus discursos políticos mencionados en el Ecuador, agradeció y expresó: “Joven… le agradezco que se preocupe en conocer mis discursos” y dejó escapar un par de lágrimas.
Tuvo la gentileza de acercarse a su biblioteca y tomar un ejemplar del libro “La Década Infame”, texto que retrata una década tomada por la corrupción en Argentina, el cual me lo obsequió con la dedicatoria que está en la fotografía que acompaña este texto. Compartimos unas copas, y salí de su casa con el orgullo de haber vumplido una de las ilusiiones más grandes de mi vida.
Cuando Velasco Ibarra murió en el Ecuador, tomé el primer vuelo disponible de Guayaquil hacia Quito para estar presente en los tres días de duelo nacional decretado por el gobierno de la época para honrar la memoria del más grande político del país, quien murió pobre, siendo un ejemplo de grandeza para todos los ecuatorianos.
Comentarios recientes